¿Qué es un gestor de fuentes?

¿Qué es un gestor de fuentes?

Gestión de fuentes

Colaboración creativa

Las fuentes son mucho más que una contribución estética: insuflan vida a los proyectos creativos y tienen un impacto decisivo en su apariencia y estilo. Las fuentes transmiten mensajes, evocan emociones y establecen el tono y la personalidad de tu contenido. Las buenas fuentes facilitan la lectura y la comprensión de los mensajes, y son esenciales para que un diseño tenga coherencia visual. Dicho de otro modo, las fuentes son un aspecto vital para comunicarse y expresarse a través del diseño de forma efectiva.

Dado que las fuentes son una pieza tan clave del diseño, las bibliotecas creativas suelen contener una amplia variedad de fuentes con numerosos estilos y variaciones. Pero, sin un programa de gestión de fuentes, gestionar estas bibliotecas puede resultar innecesariamente difícil.

¿Qué hace un gestor de fuentes?

Un gestor de fuentes es una herramienta que contribuye a que el descubrimiento, la organización y la instalación o desinstalación de fuentes sean eficientes. Su interfaz centralizada de búsqueda, previsualización y categorización de fuentes optimiza el flujo de trabajo y permite que sea más sencillo mantener la coherencia de tus proyectos creativos.

Aunque las fuentes pueden gestionarse de forma manual, hacerlo puede llevar mucho tiempo. De hecho, los y las profesionales de la creación dedican, de media, unas ocho horas a la semana a «tareas farragosas», como identificar e instalar manualmente las fuentes que faltan , por no hablar de cuando tienen que buscar fuentes para un proyecto y pasar por todo el flujo de trabajo de obtención de licencias. 

Gracias a las herramientas especializadas de gestión de fuentes, podrás descubrir, adquirir, probar, gestionar y obtener la licencia de todas tus fuentes desde un solo lugar, con lo que ahorrarás muchas horas de trabajo.

¿Cuáles son las funciones más comunes de un gestor de fuentes?

El software de gestión de fuentes que elijas debe incluir las siguientes prestaciones esenciales: 

Organización de fuentes. 

Las funciones organizativas de fuentes, como las categorías y las etiquetas, son esenciales. Tu gestor de fuentes debe permitirte categorizarlas por estilos o según los criterios que quieras, añadir descripciones a cualquier familia de fuentes, y crear carpetas con acceso personalizado. 

Busca una interfaz intuitiva que te facilite añadir fuentes nuevas al sistema. De esa forma simplificarás la eliminación de fuentes innecesarias o duplicadas, manteniendo el orden y ahorrando tiempo. 

Instalación y desinstalación de fuentes. 

Los mejores gestores de fuentes por suscripción se ubican en la nube, de forma que tu equipo puede acceder a las fuentes en cualquier momento y lugar.

Algunos gestores, como Monotype Fonts, se encargan completamente de instalar las fuentes, con lo que solo es necesario activarlas o desactivarlas mediante un botón. Una vez que se activa una fuente, estará automáticamente disponible en la mayoría de programas de software de diseño. Monotype Fonts también activa automáticamente las fuentes que faltan en un archivo para que no sea necesario perder tiempo buscándolas. 

Búsqueda y previsualización de fuentes. 

A veces, los equipos creativos no consiguen avanzar en la búsqueda de fuentes. Un buen gestor de fuentes debe ofrecer funciones prácticas de búsqueda y previsualización. Por ejemplo: 

  • Filtros de búsqueda refinados. Debe resultar fácil acotar los resultados de búsqueda filtrando por nombre, familia de fuentes, estilo, palabras clave y tono. Los filtros de atributos adicionales, como el peso y la anchura, refinan aún más la búsqueda. 
  • Previsualización de fuentes en acción. El gestor de fuentes debería permitirte ver cómo queda una fuente en diferentes contextos. Tiene que ofrecer una forma fácil de previsualizar el texto que quieras en varios tamaños y estilos. 
  • Visualización de prueba a medida que tecleas. Debe ofrecerte la posibilidad de teclear algo en cualquier sistema de escritura y previsualizar la fuente que estés probando. 

Intercambio y colaboración. 

El gestor de fuentes que se elija debe facilitar la colaboración de los equipos creativos y el intercambio de fuentes y recursos con las partes interesadas que corresponda de forma sencilla. También debe ser posible controlar los accesos. El software ubicado en la nube suele ser la forma más fácil de compartir y colaborar de forma remota. 

Obtención de licencias. 

El proceso de obtención de licencias y todo lo que lo rodea debe estar integrado en el gestor de fuentes. La entidad proveedora debe darte información sobre las licencias de fuentes y sus restricciones de uso para que te resulte fácil cumplir con las leyes de derechos de autor y los contratos de licencias. Lo ideal es que los términos de las licencias se detallen en el plan de suscripción para que solo tengas que estar pendiente de un documento de licencia.

¿Quién necesita un gestor de fuentes?

Un gestor de fuentes es un recurso muy valioso para: 

Profesionales independientes del diseño y la creación. 

Los programas de software de gestión de fuentes con sólidas prestaciones de búsqueda y elaboración de prototipos pueden ayudar a las personas que trabajan en diseño gráfico a elegir la fuente apropiada para cada proyecto sin tener que consultar los sitios web de decenas de fundiciones para encontrar su fuente ideal.

Las tareas administrativas de este tipo te roban tiempo del trabajo creativo. El software de gestión de fuentes reemplaza los complejos paneles de control y el infinito papeleo de las licencias para que quienes se dedican al trabajo creativo puedan centrarse en su especialidad. Puedes incluso previsualizar y comparar fuentes en la propia interfaz. 

Equipos creativos. 

Es crucial usar fuentes de forma coherente para que la identidad visual sea reconocible y uniforme en todos los materiales de marketing. Sin embargo, la instalación y desinstalación manual de archivos de fuentes en distintos ordenadores es un proceso lento y proclive a errores.

Las potentes funciones basadas en la nube de los gestores de fuentes por suscripción facilitan la labor de los equipos. Se puede acceder a la biblioteca de fuentes desde cualquier lugar, lo que facilita la colaboración remota. Así, los equipos no tienen que intercambiar las fuentes de forma manual y, si la herramienta de gestión es lo suficientemente potente, no tendrán que instalar y desinstalar ninguna fuente para trabajar en sus recursos creativos. 

Responsables de gestión administrativa y de TI, entre otros. 

Los equipos empresariales a veces disponen de colecciones de fuentes ingentes. Cuantas más fuentes poseen, más posibilidades hay de que surjan problemas. Además, las fuentes también pueden atestar y ralentizar los sistemas operativos. Si los responsables dejan de controlar quién usa qué fuente y para qué proyecto, puede llegar un punto en que empiecen a darse inconsistencias. Estar al tanto del estado de todas las licencias de fuentes se convierte en un trabajo a jornada completa. Como este tipo de flujo de trabajo desorganizado suele provocar errores, tu equipo está sujeto a tener que solucionar gran cantidad de problemas o volver a crear recursos de cero, con la consecuente pérdida de tiempo y dinero. 

Una herramienta de gestión de fuentes facilita la labor de cada responsable empresarial al proporcionar un centro de control desde el que instalar y desinstalar las fuentes. Los mejores gestores de fuentes integran las licencias, por lo que el departamento legal no tiene que preocuparse de realizar un seguimiento de los términos, las fechas de renovación y los pagos de las licencias. Esto protege a la organización de tener que rehacer proyectos desde cero o enfrentarse a  denuncias porinfracción de los derechos de autor.

¿Cómo se usa un gestor de fuentes?

Usar un programa de gestión de fuentes suele ser fácil. A continuación te explicamos cómo sacarle el máximo partido: 

1. Instala el gestor de fuentes.

Empieza por descargar e instalar un software de gestión de fuentes. Existen varios tipos de aplicaciones de este tipo, tanto gratuitas como de pago, así que elige una que se adecúe a tus preferencias, presupuesto y sistema operativo. 

2. Importa y organiza las fuentes.

Una vez que el gestor de fuentes esté instalado, importa tu colección de fuentes al software. La mayoría de los gestores te permiten añadir fuentes arrastrándolas y soltándolas sobre la interfaz. Usa las funciones de organización de fuentes para crear categorías y etiquetas con las que facilitar la búsqueda y la identificación de archivos.

3. Integra el gestor con tu software de diseño.

Por lo general, los gestores de fuentes se integran a la perfección con los programas de diseño más comunes. De esta forma, las fuentes activadas están disponibles automáticamente en tus herramientas de diseño sin que tengas que instalarlas o activarlas manualmente en cada aplicación. 

4. Mantenlo actualizado y gestiona las licencias.

Actualiza tu gestor de fuentes con frecuencia para disfrutar de nuevas funciones y correcciones de errores. Además, mantente al tanto de tu licencia o suscripción y asegúrate de cumplir los contratos de derechos de autor para evitar problemas legales. Algunos gestores de fuentes ofrecen funciones de gestión de licencias para que te resulte más fácil estar al día en estas cuestiones.

¿Cuáles son los gestores de fuentes más populares?

Hay muchos gestores de fuentes populares que se ajustan a las diversas necesidades profesionales relacionadas con el diseño y la tipografía, así como de las personas amantes de las fuentes. Veamos algunas de las opciones disponibles: 

Monotype Fonts. 

Monotype Fonts es una solución ubicada en la nube que simplifica el descubrimiento, el uso, la obtención de licencias y la instalación de fuentes a través de una sencilla aplicación. Su interfaz intuitiva otorga a quienes se suscriben acceso a una amplia colección en aumento: más de 150 000 fuentes de la mayor calidad creadas por las fundiciones y profesionales del diseño más célebres del sector. Con la licencia ilimitada para ordenador, puedes experimentar con todos los tipos de letras que quieras antes de decidir cuál quieres usar en tus productos finales. 

La herramienta también te permite importar tu biblioteca de fuentes actual y proporciona automáticamente las fuentes que faltan en los archivos de diseño. Se integra con la mayoría de las aplicaciones del mercado (como Sketch, Illustrator, Photoshop e InDesign), para que los equipos creativos no pierdan el tiempo buscando las fuentes que faltan. Las licencias también se integran en todos los planes de suscripción para garantizar que solo pagues por las fuentes que necesites. 

La barra de búsqueda de la aplicación te ayuda a encontrar las fuentes y familias de fuentes adecuadas para tus proyectos fácilmente al autocompletar sus sugerencias conforme tecleas. Las etiquetas de Monotype se basan en una innovadora tecnología de IA que se corresponde de manera precisa con una amplia variedad de tonos y de descriptores, lo que te permite obtener resultados precisos con los términos de búsqueda que se te ocurran en cada momento. 

Una vez que hayas seleccionado fuentes para tus proyectos, Monotype Fonts te facilita organizarlas de la forma que más os convenga a ti y a tu equipo, ya sea por proyecto, estilo, tono o cualquier otro criterio que se os ocurra. Este sistema de organización compartida facilita el acceso a las fuentes y reduce el riesgo de que alguien pierda un archivo de fuente o use una fuente incorrecta en un recurso. Además, puesto que se trata de una aplicación ubicada en la nube, todo el equipo podrá acceder a las fuentes que necesiten para proyectos colaborativos en cualquier momento y lugar. 

Gestor nativo de fuentes (Windows). 

Los sistemas operativos Windows están equipados de serie con un gestor de fuentes integrado que permite ver, instalar y desinstalar fuentes. El gestor nativo de fuentes de Windows ofrece funciones básicas de organización de fuentes y permite activarlas o desactivarlas. Aunque carece de prestaciones avanzadas, es una solución práctica para gestionar fuentes en plataformas de Windows. 

Catálogo Tipográfico (Mac). 

Catálogo Tipográfico es el gestor nativo de fuentes de los sistemas operativos Mac. Catálogo Tipográfico permite a los usuarios instalar y activar fuentes, crear colecciones y previsualizar tipos de letras cómodamente. Además, proporciona información sobre las licencias de fuentes y permite validar las fuentes para garantizar la integridad de sus archivos. Catálogo Tipográfico viene preinstalado en todos los ordenadores Mac. 

Adobe Fonts. 

Adobe Fonts, anteriormente conocido como Typekit, es una herramienta de gestión de fuentes que ofrece acceso a una amplia biblioteca de fuentes de alta calidad para usarlas en las aplicaciones de Adobe Creative Cloud. Adobe Fonts se integra con otros tipos de software de Adobe, de forma que los usuarios y usuarias pueden buscar, activar y sincronizar fuentes en todos sus proyectos. 

FontBase.

FontBase es un gestor de fuentes multiplataforma que ofrece una serie de funciones para organizar y activar fuentes. Admite diversos formatos de fuente y dispone de una interfaz para buscar y previsualizar fuentes. Con FontBase se pueden buscar y activar fuentes, así como crear colecciones, según se desee. 

¿Cuál es el gestor de fuentes ideal para mí?

Ten en cuenta los siguientes aspectos clave a la hora de elegir un gestor de fuentes para asegurarte de que se ajuste a tus necesidades creativas y logísticas: 

Facilidad de uso e interfaz. 

Busca un gestor de fuentes con una interfaz intuitiva y clara que te permita acceder, explorar y organizar tu colección de fuentes fácilmente. 

Una interfaz clara, además de mejorar la exploración y la organización, fomenta tu productividad. Al fin y al cabo, tratar de identificar la fuente que necesitas usando una herramienta de búsqueda compleja que carece de filtros eficaces es una tarea lenta y agotadora. Si el proceso es demasiado estresante para el equipo creativo, podrían acabar eligiendo un estilo de fuente inadecuado y teniendo que repetir los diseños, con lo que desperdiciarían tiempo y dinero. 

Compatibilidad e integración. 

Determina el grado de compatibilidad del gestor de fuentes con tu sistema operativo y tus aplicaciones de diseño. El gestor debe integrarse a la perfección con el software que use tu equipo para que afecte lo mínimo posible al flujo de trabajo. 

Prestaciones y funcionalidad. 

Evalúa las prestaciones y funcionalidad del gestor de fuentes sobre la base de tus necesidades y prioridades. Debe tener características esenciales, como la activación y desactivación de fuentes; su organización y categorización de fuentes, y su previsualización detallada. También debe tener funciones avanzadas que te resulten útiles según tus necesidades específicas , como prestaciones relacionadas con la colaboración, el acceso a fuentes prémium o la gestión de licencias. 

Soporte y recursos. 

Determina el nivel de soporte y recursos que ofrece la suscripción. Un gestor de fuentes de alta calidad debe proporcionar documentación útil, tutoriales y atención al cliente en caso de que tengas problemas o dudas en relación con el software. 

Monotype Fonts es un gestor de fuentes diseñado con todas estas necesidades en mente. Visita nuestra página de planes para elegir la suscripción que más te convenga.